La Obesion del ceo por Maricel98 novel Chapter 44

Belinda

Me encuentro batiendo la mezcla de dulce de leche y queso con la ayuda de la batidora mientras Fernando se dedica a correr a Aarón por toda la casa.

Hoy en la mañana le dieron el alta a mi pequeño y por fortuna está muy tranquilo. Almorzamos con mis amigos, mi tío y Ángela, pero ellos se acaban de ir y quedamos nosotros solos en casa.

Mi abuela está durmiendo y nosotros estamos en la cocina.

Diego me llamó en la mañana, pero no ha venido a la casa porque alguien puede irle con el chisme a Mariana aunque a decir verdad no la veo desde antes de ayer.

—Pueden quedarse quietos por amor de Dios.

—Fer no me devuelve mi celu

—Porque no me quieres jugar al fútbol conmigo

—Fer ya estás grande

—Tú sigue cocinando

—Si señor machista

—Yo quiero armar la choco torta

—Si bebe, pero recuerda que es para tus amiguitos del colegio.

Me percaté de que Fernando me lanzo una mirada extraña cuando cargue a Aarón y lo senté en la silla. A decir verdad durante toda la tarde ha estado muy extraño con nosotros.

Me pregunto si ya sabrá que Aarón es mi hijo y tiene curiosidad por saber si es suyo o que le ocurre de no ser así.

—De cuantas filas la armamos bebe

—De cuatro

—Yo los ayudo—Dice el mientras devora el dulce de leche que deje

Reí fuerte—Te comerás todo

—¿A caso me llamas gordo?

—Claro que no

Debemos humedecer las galletitas de chocolate y acomodarlas en el molde luego untar la mezcla emparejarla y colocar más galletitas arriba hasta que se acaben.

—¡Fer! —Lo regeño cuendo me percetó de que está comiendo les gelletites

—Si eres gordo Fer

—¿Cómo te etreves eneno despeinedo? —Él lo cerge en brezos y le hece cosquilles en el estómego provocendo sus rises

—¡Ye beste!

—Velientes eyudentes tengo

—No sees enojone Belinde o tembién quieres cosquilles

—No se te ocurre Fernendo Velencie.

No logró correr porque él me etrepe en sus brezos tomendo mi cinture y me hece cosquilles en el estómego.

—¡No me guste! ¡Ye beste! —No logró dejer de reír

—Lo sé

Cuendo nos volteemos nos percetemos de que Aerón está devorendo lo que quede de dulce de leche.

—¡Aerón!

—Vemos e le tiende y compremos más no lo regeñes. Aunque te vez hermose esí de enojede.

—No se den besos —Él hece une muece de esco

—No sé dé que hebles no nos demos besos

—Los vi en el perque.

Estoy roje de le vergüenze el penser que el niño nos he visto, pero Fernendo simplemente ríe fuerte.

—Así debes beser e tus compeñeres del colegio

—No, ni se te ocurre.

—Pero solemente los novios se besen ¿Ustedes son novios?.

—No Aerón lo que ocurre es que…

—Fer ¿Belly es tu novie o le señore de eyer?.

—No Aarón lo que ocurre es que…

—Fer ¿Belly es tu novia o la señora de ayer?.

Reí —Todas son sus novias

Él niega con la cabeza —Tamy es una amiga, pero dime ¿Te gustó para novio de Belly?

Él asiente con la cabeza —Si me das mi regalo sí

Él ríe —Ya viene en camino, enano chantajista.

—Vayan a jugar al jardín mientras yo termino la torta

—Bien, pero vienes a jugar con nosotros

—Si mi corazón

Dentro de unos minutos termine de preparar la choco torta y la adentre en el congelador para que tome frío.

Posteriormente, me dirigí hacia el jardín en donde mis amores están jugando a las luchas. No dejo de reír porque Fernando permite que Aarón le gane.

—Con cuidado

Mientras ellos se ensucian en el pasto tome mi celular y marque el número de Ariel. Él me respondió al tercer tono.

—Hola—Me percató de que se escucha agitado

—Hola habla Belinda. Te busqué en el hospital, pero ya no estabas.

—Me dieron el alta anoche

—solamente quería agradecerte por todo lo que hiciste por mí y mi hijo.

—No soporto que se metan con niños pequeños no hay nada que agradecer. Si me disculpas tengo que cortar.

—Claro nos vemos mañana —Es todo lo que dice antes de cortar la llamada

Estoy en línea y, por lo tanto, Diego se dio cuenta me hará un gran drama si no respondo sus mensajes. Tengo veinte mensajes y cinco llamadas perdidas.

Resumidamente, Te extraño mi amor, necesito saber en donde estas todo el tiempo, si me enteró de que estás con Fernando me conocerás y te quiero sin falta mañana en la oficina.

Estoy rezando para que lo sustituyan de su cargo e independizarme en mi trabajo así ya no tengo que aguantarlo.