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¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia novel Chapter 1156

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Capitulo 1156 

-¿Qué, este es el cementerio de Sergio

Elia se sorprendió, y volvió a mirar a su alrededor cuidadosamente. Cuando habla venido al funeral de Sergio, era de dia

Además, ella había venido a escondidas; la familia Griera no le permitia asistir al funeral de Sergio

Había tomado un taxi, llegó a la puerta lateral y observó el funeral de Sergio mientras se escondía, despidiéndolo en silencio por última 

vez

En ese momento estaba desconsolada, con el corazón sumido en la más profunda tristeza, ¿cómo iba a tener ánimo para recordar el camino

Ahora que Marina menckchaba que ese lugar era donde reposaban los restos de Sergio, Ella comenzó a observar el entorno entre la sorpresa y la confusión

Todo estaba oscuro, no habia farolas, solo podían contar con las luces del carro para mirar alrededor

Elia miró y empezó a sentir que algo le resultaba familiar

No podia creer que, nerviosa por deshacerse del carro que la seguía, habia llegado hasta el cementerio de Sergio.g2 

-Es de noche, no hay luz y hay tantos caminos que se parecen, ¿cómo voy a reconocer el lugar solo por unos árboles? -respondió Elia a Marina

-Excusas! -Marina la miró fijamente, con una mirada que resultaba aterradora

Las carreteras de las afueras ya eran tétricas y oscuras, y al encontrarse con la mirada sombría y feroz de Marina, Elia sintió un escalofrio

Instintivamente, dio un paso atrás, mirando a Marina con cautela

Marina se acercó a ella con un rostro sombrio y dijo: -El ha estado reposando aqui por más de un mes, ¿alguna vez viniste a verlo

-Vendré mañana de dia a verlo -respondió Elia con cautela-. Ahora es muy tarde, está todo oscuro, no se puede ver nada

Marina se acercaba paso a paso, y Ella retrocedia nerviosa hasta que tropezó con una piedra y se tambaleó

Marina la agarró del brazo y la arrastro: -Si no le temes ni a los fantasmas. ¿por qué te asusta la oscuridad? Tengo una linterna, te alumbraré el camino. Ve misma y comprueba cuán solo se siente él alli abajo

La fuerza con la que Marina sujetaba el brazo de Ella era considerable, arrastrándola con decisión

Sin opción, Elia fue arrastrada por Marina, ambas cruzaron el sendero hasta llegar frente a la lápida de Sergio

Marina soltó su brazo y sacó una linterna de su mochila, la encendio, y el haz de luz iluminó directamente la fotografia de Sergio en la lápida

La foto de Sergio estaba hecha en blanco y negro, iluminada por el haz de la linterna, que revelaba su sonrisa soleada y juvenil. No se podia negar que era un muchacho guapo y lleno de vida

Esa cara tan joven y esa foto tan radiante, estaban pegadas en una lápida

Ese chico guapo y alegre, que habia estado lleno de vida en el mundo de Elia, ahora era solo un puñado de tierra, enterrado bajo el suelo

Al ver la foto de Sergio, el corazón de Ella se sintió como si lo atravesara una aguja, sus ojos se humedecieron y su respiración se entrecorto mientras miraba la lápida de Sergio

El dia del entierro de Sergio, ella solo pudo mirar desde lejos y no sabia donde se encontraba exactamente su lápida ni que foto habian usado

En ese momento, al verlo en la lápida, todo el dolor y la tristeza le inundaron, y las lágrimas brotaron de sus ojos

Elia se cubrió la boca y empezó a llorar

-¿En serio?, ¿te derrumbas con tan solo con ver su foto? -dijo Marina con sarcasmo

-¿Sabes cuánto dolor senti al enterarme de su muerte? ¿Sabes cómo he vivido este último mes desde que él se fue? -Marina temblaba al hablar, tratando de respirar profundamente para controlar su dolor interior mientras hacia esas preguntas de presión

Elia

-Antes, aunque no pude tenerlo. saber que estaba vivo me daba esperanza. Me decia a mi misma que aún tenia una oportunidad, que con solo verlo de lejos me sentia satisfecha hasta incluso feliz. Lo espere durante siete años, y lo que llegó al final fue la noticia de que se había ido para siempre. ¿Tienes idea de cuánto me dolio

Capitulo 1157 

Capitulo 1157 

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