¡Domestícame! Mi pequeña y gran Elia novel Chapter 324

Capitulo 324 

Habia una reunión en la mañana. 

Elia se adelantó y preparó la sala de conferencias. 

A las diez y media, la reunión comenzó puntualmente. 

Ela se quedó en la puerta esperando a los ejecutivos de alto nivel que llegaban a la reunión, entraron en la sala y tomaron sus lugares. 

Pero Asier aun no había llegado, asi que Elia seguía esperando en la puerta de la sala 

Después de un rato, Asier finalmente llegó tarde, caminaba rápidamente, con Bruno detrás de él. 

Aun a la distancia, Elia noto que Asier estaba de mal humor, tenia una expresión sombria y desprendia un aura fria. 

A medida que se acercaba, el aire se llenaba de frialdad, haciendo que la espalda de Elia se tensara inconscientemente y su respiración se interrumpiera momentaneamente 

Habia presenciado en la oficina su repentino enfado que la hizo salir de alli asustada g2 

Ahora, al ver su rostro indiferente, Elia se puso nerviosa y su corazón le latió más rápido. 

Al verlo acercarse, Elia bajó la cabeza dijo respetuosamente. “Buen dia, señor Sus ojos profundos la miraron por un instante y luego apartó la mirada 

Al pasar por su lado, el aire que levantaba era frio y cortante, golpeando la piel de Elia, casi causándole un ligero dolor. 

Asier tomo su lugar en la silla presidencial, se hundió en el sillón negro, emanando una aura fria y opresiva. 

Los empleados de la sala de juntas sintieron su frialdad y ninguno se atrevio a hacer ruido. 

Elia volvió a la computadora multimedia y comenzo a proyectar la información para la discusión de la reunión. 

Varios ejecutivos de alto nivel expresaron sus opiniones. 

Pero todos fueron rechazados friamente por Asier, y hasta se enfado con algunos. 

Muchos fueron reprendidos por el 

El ambiente era tan opresivo que parecia que todo podia congelarse en cualquier momento. 

Elia tambien era cautelosa, incluso trataba de respirar lo más silenciosamente posible. 

Después de la reunion, todos los ejecutivos de alto nivel se apresuraron a salir de la sala de conferencias. 

Pero Elia tenia que esperar hasta que todos se fueran para poder poner en orden la sala y finalmente salir. Elia observaba a Asier con cuidado, temiendo que se enfadara con ella repentinamente. 

En esta reunión, se aseguró de no cometer ni el mas insignificante error. 

Justo cuando Elia estaba nerviosa, Asier se levantó, con largas zancadas, se fue de la sala, sin siquiera mirar atrás 

Al verlo salir de la sala, Elia finalmente respiró aliviada. 

Cuando se recupero, vio a alguien justo frente a ella, que le dio un susto. Al fijarse bien, se dio cuenta que era Bruno. 

Se tocó el pecho y dijo sorprendida, “Bruno, ¿por qué me miras así? Casi me matas del susto.” 

Bruno la miro con interés y curiosidad. ¿Qué fue lo que hiciste para enfadar al Sr. Griera?” 

Elia señalandose a si misma, pregunto sorprendida, ¿Lo que hice yo?” 

Bruno, con una sonrisa como si fuera obvio lo que dijo, le respondió, “Por supuesto que fuiste tú, ¿quién más podría hacer que el Sr. Griera se enfadara tanto?” 

Elia parpadeo inocentemente y después de pensar un poco, dijo, “No hice nada para enfadarlo, simplemente le devolvi su BMW, acaso eso fue lo que lo enfado?” 

“¿Qué? ¿Devolviste el auto que el Sr. Griera te regaló?” Bruno preguntó sorprendido. 

Elia pregunto, “¿Hay algún problema con eso?” 

Bruno con una expresión de desesperación en su rostro, asinti y dijo. “Es admirable lo que hiciste, devolver el regalo que te dio el Sr. Griera y aun ası poder estar aqui tan calmada, es realmente asombroso 

Despues de decir eso, Bruno salió de la sala de conferencias. 

Ella estaba confundida, no entendia lo que Bruno queria decir 

¿Acaso estaba mal no aceptar un regalo tan costoso de Asier? 

Finalmente llegó la hora del almuerzo, Ela aprovecho ese tiempo para ir al centro comercial más cercano al Grupo Griera. 

Planeaba comprar un traje idéntico al de Sergio y devolverselo