Capítulo 510
No fue hasta que escuchó la voz de Benny que Roxanne recuperó sus sentidos y recordó que estaban ensayando.
En cuanto a las acciones de Lucian, el guión las necesitaba.
Al darse cuenta de ese hecho, la disculpa de Roxanne sonrió a los niños. “Lo siento por distraerme. Por favor continua.”
Después de intercambiar miradas curiosas, los niños accedieron obedientemente.
Mientras tanto, Lucian, que estaba mirando a Roxanne, tuvo una epifanía que provocó una
expresión sombría en su rostro.
Sintiéndose culpable hasta el punto de no atreverse a mirar en su dirección, Roxanne naturalmente no notó el cambio en él.
A medida que avanzaba el ensayo, tuvieron que cambiar sus papeles.
Roxanne, que interpretó a la princesa después de haber crecido, lo hizo con mucho aplomo.
No fue hasta que apareció el príncipe mientras ella dormía que sus frustraciones comenzaron a acumularse.
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Asumiendo el papel del príncipe, Lucian sería demasiado distante o no lo suficientemente enojado cuando se enfrentara a Estella.
Naturalmente, su actuación preocupó a Roxanne.
“Señor. Adiós, asustarás a los niños de esta manera.
“Señor. Adiós, te enfrentas a una bruja, no a Essie. Tienes que parecer más feroz”.
Luciano se quedó sin habla.
Después de algunas rondas, la cansada Estella le dio a su padre una mirada irónica, con el rostro lleno de molestia.
Bajo la mirada de su hija, Lucian no pudo resistir sentirse impotente al respecto.
A pesar de su deseo de actuar bien, su temperamento intrínsecamente tranquilo lo obstaculizaba, lo que le dificultaba expresar la emoción correcta.
Sin decir una palabra, tanto el padre como la hija se quedaron quietos y se miraron el uno al otro.
Cuando los tres niños vieron las reacciones de Lucian y Roxanne, todos estaban igualmente confundidos.
Después de un momento de silencio sepulcral, Roxanne fue la primera en recuperar la compostura. Comprobando la hora como si nada hubiera pasado, sonrió a los niños. “Se está haciendo tarde. Ya que tienes escuela mañana, eso será todo por hoy.”
Dada la cantidad de intimidad que se había producido entre ellos durante todo el período, Roxanne estaba demasiado avergonzada para enfrentarse a Lucian nunca más.
Afortunadamente, los niños cooperaron y estuvieron de acuerdo con lo que ella dijo.
Cuando no escuchó la respuesta de Lucian después de un tiempo, Roxanne, armándose de valor, lo miró, “Sr. Adiós, continuemos la próxima vez.”
Al notar el pánico en su rostro y recordar la sensación de su toque, Lucian asintió mientras una emoción desconocida parpadeaba en sus ojos. “Está bien.”
Apenas hablaba, se acercó a Estella para tomarle la mano,
No obstante, Estella miró a Roxanne con renuencia. “Milisegundo. Jarvis, ¿vamos a continuar mañana?
Estella quería verla todos los días.
Al final, Roxanne respondió de una manera vaga que indicaba su acuerdo.
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