No Soy Tu Bien Desechable (Fernanda Sierra ) Novela novel Chapter 400

Capítulo 400 

Palmira exclamó: “Esa vieja habla sin saber! ¿Por qué no viene ella a correr entonces?” 

“Shh! Mejor collate un poco, que después te van a castigar otra vez. 

Aunque Wilma también se quejaba, no tenía más opción que seguir corriendo. 

Femanda iba adelante, su velocidad no em ni rápida ni lenta, después de diez vueltas, todos estaban ya bastante cansadas, pero la respiración de Fernanda un parecia controlada, incluso Ofelia no pudo evitar mirarla con más atención, 

Cuando ella se habin unido al equipo, después de diez vueltas ya se habla desplomado en el suelo. 

Pero Femanda, jaún parecia imperturbable! 

Femanda simplemente las miró tranquila. 

La costumbre no es algo que se desarrolle de la noche a la malona, fueron precisamente sus hábitos anteriores los que le permitieron tener un fisico más fuerte. 

Después de treinta vueltas, ya había pasado una hora. 

Todas estaban tiradas en el suelo, sin fuerzas 

Y Femanda apenas logró estabilizar su respiración, pero su corazón aún latia rápidamente. 

La intensidad de treinta vueltas todavia era demasiado. 

“Muy bien, ahora pueden ira comer” 

Candelana miro a Femanda y dijo Fernanda, quédate“. 

Los chicos ya habian terminado hace rato, y al ver esta escena, Abilio rápidamente golpeó el brazo de Isauro, diciendo: “Mira, mira, ¿no te parece que hay algo maro con Femanda? Todos se van y Candelaria solo la hace quedarse a ella“. 

“He oido que Femanda entró con ayuda, esto es claramente darle trato preferencial“. 

Abilio comentó: “Todos nosotros hemos trabajado muy duro para llegar hasta aquí, y ella simplemente se cuela, ah, todo porque tiene una cara bonita y un buen mando“. 

“Tonterias! Femanda y el presidente del Grupo Borrego están a punto de divorciarse, seguro tiene otro patrocinador detrás 

“Vaya, eso si que es explosivol 

Isauro no solia interesarse en estos chismes, se levantó y dijo con indiferencia: “Creo que ustedes tienen demasiado tiempo libre“. 

“¡No, no, capitán! Ya descansamos suficiente, vamos a comer!” 

Abilio se levantó de inmediato, alineándose con Isauro. 

“¡Vamos, ya basta de chismes! (Levantense! ¡A comer 

“¡Vamos, vamos!” 

Todos se dispersaron rápidamente. 

Por su parte, Candelaria le entregó a Femanda unos papeles, diciendo: “Ya le pedi al nutricionista que te prepare tus comidas especiales, el Sr. Huerta sugirió que te asignen un chef personal“. 

“¿Personal?” 

Fernanda no se equivocaba en su suposición. 

Pedro estaba tramando algo. 

Desde ser insertada en el grupo por la puerta trasera, hasta el alarde de ayudarla con la mudanza de su dormitorio, y ahora preparándole un nutricionista profesional. 

Pedro, siendo tan astuto, ¿cómo no iba a saber que esto no era ningún favor sing más bien una forma de perjudicarla? Fernanda la confrontó directamente: “¿Qué pretende el Sr. Huerta exactamente? ¿Quiere hacerme la enemiga de todos?”