No Soy Tu Bien Desechable (Fernanda Sierra ) Novela novel Chapter 561

Capítulo 561 

Son apenas los ocho, por favor déjame dormir un poco más!” 

Havier estaba a punto de enloquecer 

Habla pasado toda la noche en vela acompañando a Fabio a este de solado lugar, y antes de que pudiera descansar un poco, Fabio lo había llevado a alquilar un auto por un mes, luego hablan corrido a esta misembla playa para revisar el progreso de la filmación del programa. 

Si no fuera porque Tablo es su gran amigo, Javier ya hubiera renunciadol 

Al diablo con todo, que lo haya hecho quien quisiera Incluso un agente secreto no tendría tantas tareas cómo di 

“Vamos a ver“. 

Los binoculares de Fabio le permitan ver a gran distancia, y se podia ver qise Femanda y Sebastian ya hablan subido al barco pesquero. Al ver esta escena, Fabio funció el ceño: “Ve, compra un barco pesquero“. 

*¿Qué cosa?” 

Javier salto del auto 

¿Un barca pesquero? 

¿Acaso habia barcos pesqueros en este lugar desolado? 

El equipo de producción estaba realmente desesperado, gente rica como ellos normalmente no elegiría este lugar para tener citas románticas. 

El ambiente era mediocre, la ubicación era mediocre, incluso el lugar donde se hospedaban y el auto alquilado eran medicores, 

Javier suspiro, realmente no queria gastar dinero en vano. 

Pero al siguiente segundo, Javier con un gran gesto, compró un barco pesquero 

En el barco, Javier estaba somnolento 

Fabio, mientras conducia el barco, logró alcanzar a Fernanda y Sebastián. 

50 3 2 5 2 2 2 2 2 2 2 2 3 2 

Habia muchos barcos pesqueros por aqui y era raro que alguien prostora atención a un pequeño barco pesquero, especialmente porque los barcos de esta área se parecian mucho entre si. 

Por otro lado, Femanda y Sebastián estaban observando atentamente la enorme red de pesca 

Femanda frunció el ceño: “Realmente podemos atrapar mariscos con esto?” 

“No estoy seguro“. 

“Probemos“. 

Fernanda tenia una gran habilidad manual, pero la mayoría de las tareas fisicas pesadas las hacia Sebastián. Juntos lanzaron la red al agua, y según las indicaciones de los pescadores, ahora solo necesitaban quedarse quietos y esperar a que los mariscos entraran en la red, no necesitaban hacer nada más. 

Para Femanda, pescar mariscos era algo nuevo, mientras que Javier solo la miró y dijo: “Es inútil, ¿qué se puede pescar en este lugar miserable? Como mucho atraparin un par de cangrejos de dos onzas y algunos peces y camarones insignificantes“. 

Los mejores mariscos se encontraban en aguas profundas y era raro encontrar especies salvajes. 

Inmediatamente, Fabio hizo una llamada: “Traigan aquí los mariscos más caros que tengan, los quiero ahora“. 

Después de colgar, no pasó mucho tiempo antes de que un pescador llegara en su barco, trayendo cajas y cajas de mariscos congelados. 

“Sr. Fabio, ¿esto es suficiente?” 

Se podia ver que las cajas de poliestireno estaban llenas de mariscos frescos con hielo, había de todo, desde langostas hasta cangrejos.