No Soy Tu Bien Desechable (Fernanda Sierra ) Novela novel Chapter 648

Capítulo 648 

No solo Femanda no tenía su certificado de nacimiento, sino que Fablo ni siquiera tenía su documento de identidad. 

En el camino de regreso, Fabio estaba visiblemente molesto. 

Femanda no pudo evitar mirar a Fabio varias veces y preguntó: “Oye… ¿no sabias que para casarse había que llevar el certificado de nacimiento? “Yo no tengo experiencia“, 

Fabio se arrepintió, pero ya era demasiado tarde. 

Si hubiera sabido que para casarse necesitaba el certificado de nacimiento y el documento de identidad, habría llevado estos documentos consigo todos los días. 

Viendo a Fabio asi, Fernanda no pudo evitar reirse. 

No se sabe si fue la risa de Femanda lo que lo estimuló, pero Fablo de repente dio la vuelta al auto. 

Femanda sorprendida dijo: “Fabio! ¿A dónde vas?” 

“A casa“. 

La “casa” a la que se refería Fabio era la de la familia Rivera 

Llegaron juntos al estudio del abuelo Mateo y lo encontraron regando las plantas. 

Se detuvo sorprendido: “Casarse? ¿Ahora?” 

Babuelo Mateo claramente no entendia la situación y miró confundido a su nieto. 

Después de un momento, el abuelo Mateo dejó la regadera, se acercó a su nieto y le lanzó un manotazo que, debido a la diferencia de altura, no alcanzó la cara de Fabio, sino su hombro. 

El abuelo Mateo, apoyándose en su bastón, dijo enojado “Ustedes los jóvenes no toman el matrimonio en serio!” 

Al ver al abuelo Mateo enfadado, Fernanda trató de calmar las cosas: “Abuelo, Fabio solo estaba bromeando, yo no…” 

“¡Tú no digas nada!” 

El abuelo Mateo interrumpió a Fernanda y luego, señalando a Fabio: “El matrimonio es un asunto muy serio! ¿Le pediste matrimonio? ¿Ella aceptó casarse contigo? ¿Ya diste el regalo de compromiso? ¿Preparaste la fiesta de compromiso? ¿Organizaste la boda? ¿Todo está listo? Sin nada preparado, ¿por qué debería ella casarse contigo?” 

Femanda se quedó pasmada ante el sermón del abuelo Mateo a Fabio. 

Pensó que el abuelo Mateo estaba en contra de que se casaran, pero resultaba que estaba molesto por esto! 

“¡No te comparo con tu padre, pero tu habilidad para conquistar a una chica es mucho menor!” dijo el abuelo Mateo. 

Fabio reflexionó por un momento y dijo: “Ya he transferido todas mis propiedades a nombre de Fernanda y ya le pedi matrimonio. Ella ya me aceptó“. 

Dicho esto, Fabio levantó la mano de Fernanda, mostrando el ahillo. 

El abuelo Mateo lo miró y luego dijo: “Eso es algo personal tuyo. ¿Incluiste a la familia Rivera? ¿Me notificaste a mi? ¿No, verdad? Entonces, järgate de aqui! No se atrevan a casarse en secreto sin que prepare la fiesta de compromiso!” 

Luego, el abuelo Mateo se acercó a Femanda y le susurró: “La ley sobre la distribución de bienes después del matrimonio es muy clara. Si primero hacen la boda y luego registran el matrimonio, todos los regalos y dotes que recibas serán considerados como tus bienes previos al matrimonio. Fabio no podrá tocar ni un centavo de eso, puedes aprovechar esta oportunidad para sacarle algo más!” 

Al escuchar esto, Fernanda soltó una risa nerviosa y miró a Fabio, quien dijo tranquilamente: “Mi abuelo tiene razón. Además, como la unión es entre la familia Rivera y la familia Sierra, todo mi dinero ya está en manos de Fernanda. En cuanto a los regalos de compromiso y los gastos de la boda, serán responsabilidad de mi abuelo“. 

“¡Eso qué importa! ¿Ahorrar en la boda de mi nieta? ¡Vamos a hacerlo en grande!” 

El abuelo Mateo aceptó sin dudarlo.