No Soy Tu Bien Desechable (Fernanda Sierra ) Novela novel Chapter 974

Capítulo 974 

En la Compañia Médico Estética Victoria, Fernanda miró brevemente la tarjeta de presentación en su mano y estacionó su auto deportivo de edición limitada al lado de la carretera. El llamativo color rosa del auto deportivo realmente destacaba en esta calle. Especialmente porque Fernanda, con su piel blanca, belleza 

deslumbrante y largas piernas, habia venido vestida para impresionar, atrayendo instantáneamente la atención del personal. 

¡Nunca habían visto a una mujer tan hermosa como Fernanda en su tienda! 

“Señorita, ¿es usted nueva aquí? ¿Qué tratamiento le gustaría hacerse?” 

La gerente se acercó personalmente a Fernanda, y no pudo evitar evaluarla de arriba abajo. Fernanda se quitó las gafas de sol, revelando un par de ojos seductores, y la gerente también quedó fascinada. ¡Era demasiado hermosa! 

“Vengo por recomendación de un amigo. Escuché que tienen tratamientos de belleza y quise venir a probar“. 

Fernanda se sentó perezosamente en el sofá, cogiendo casualmente una revista de la mesa. 

En ese momento, el anillo del tamaño de un huevo de paloma en la mano de Fernanda capturó la atención de todo el personal. Además, llevaba en la muñeca un reloj de diamantes valorado en siete cifras. 

La gerente se quedó sin aliento. ¿Quién llevaría el valor de una casa en su muñeca? Fernanda se dio cuenta de que todos la miraban y preguntó como si no entendiera: “¿Qué sucede?” 

“Es que usted es muy hermosa, hemos atendido a algunas celebridades, pero ninguna se cuida tan bien como usted“. 

Fernanda sonrio ligeramente. Esta compañía de estética médica era muy conocida en la alta sociedad, ya que pertenecía al Grupo Lobo, y dado que el Grupo Lobo tenía tantos artistas bajo su mando, naturalmente promocionaban la compañía de estética médica del Grupo Lobo. 

Fernanda había venido hoy a mostrarse tan ostentosamente con el propósito de elevar su propio valor, haciendo que el personal no se atreviera a tratarla con negligencia. Así, sería más fácil obtener la información que quería. 

“Por ahora, hagamos un tratamiento facial. Si la experiencia no es buena, no 

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volveré“. 

Fernanda adoptó una actitud orgullosa, pero no hizo que nadie se sintiera incómodo. Al contrario, parecía totalmente justo. 

Fernanda se levantó y el personal la llevó a la habitación más grande, donde incluso le ofrecieron bebidas y frutas como muestra de amabilidad. 

Fernanda miró a los artículos sobre la mesa y dijo indiferentemente: “Dejen eso, no podré comer nada después del tratamiento“. 

Mientras bajaba la cabeza, Fernanda miró intencionadamente la etiqueta del fabricante en el equipo de belleza, pero como la letra era muy pequeña, no pudo verla claramente. 

“Señorita, puede acostarse y nosotros nos encargaremos de su tratamiento“. 

Fernanda asintió y se recostó cómodamente en la camilla. Pronto, dos empleados vinieron a preparar a Fernanda. Aunque Fernanda estaba sin maquillar, su piel era tan perfecta que no tenía ni una sola imperfección. 

¿Suele cuidarse mucho, señorita? Su piel es mucho mejor que la de cualquier cliente qu 

haya visto“. 

“Supongo que sí, no voy a cualquier salón de belleza“. 

Fernanda charlaba de manera casual con el personal, pero pronto frunció el ceño y dijo: “Tu técnica es demasiado inexperta, haz que la gerente venga a hacerme el tratamiento“. 

“Pero…” 

“Yo pago más“. 

Con esa simple frase de Fernanda, el personal obedeció y se retiró. 

Poco después, la gerente entró desde el exterior y dijo: “Señorita, lamento mucho el inconveniente, parece que el personal no estuvo a la altura. Yo misma le haré el tratamiento facial y, po la cara será la mitad, ¿qué le parece?” 

esta vez, el costo del tratamiento de la mitad izquierda de 

Tu actitud es buena, pero no me falta dinero“.